A través de una ley el gobierno de China prohíbe que los niños menores de 18 años jueguen videojuegos más de 3 horas a la semana. Las razones que esgrimió el gobierno han sido la creciente adicción a los videojuegos que encuentran en los adolescentes y la regulación también exige que las plataformas de videojuegos deban conectar a los jóvenes a instituciones estatales específicas que puedan ayudarlos en casos de adicción. La polémica existe porque a partir de ahora los niños tendrán que registrarse con sus nombres reales, o tener al menos algún tipo de validación biométrica. Las plataformas sólo podrán permitir a los menores de 18 años conectarse viernes, sábado y domingos entre las 20 y las 21 horas.
«Opio espiritual» han llamado desde uno de los medios estatales chinos al consumo de videojuegos. «Los adolescentes son el futuro de nuestra patria. Proteger la salud física y mental de los menores es uno de las prioridades vitales de nuestro pueblo», ha afirmado el organismo encargada de implementar esta regulación. Sin dudas el desencuentro entre las juventudes y el Partido Comunista chino es algo que preocupa en los círculos de poder sobretodo a partir del surgimiento de la contracultura de Tang Ping, una especie de hedonismo escéptico que crece en las nuevas generaciones y que podría afectar la productividad de la economía.
Si bien existen unas 500 millones de personas que sufren miopía a causa del uso de videojuegos y la Organización Mundial de la Salud declaró en 2019 la adicción a los videojuegos como una patología mental no están del todo claro los efectos negativos de jugar de forma moderada antes bien hay diversos efectos beneficiosos suficientemente estudiados. En Estados Unidos por caso la empresa Akilli Games ha desarrollado un videojuego para tratar de forma clínica el Trastorno y Déficit de Hiperactividad en niños y ha obtenido la primera licencia de la FDA.
«Opio espiritual» han llamado desde uno de los medios estatales chinos al consumo de videojuegos. «Los adolescentes son el futuro de nuestra patria. Proteger la salud física y mental de los menores es uno de las prioridades vitales de nuestro pueblo», ha afirmado el organismo encargada de implementar esta regulación.
China prohíbe que los niños jueguen videojuegos el resto de la semana aunque podría hacer alguna excepción en días festivos o días especiales y extenderles alguna hora más como excepción. La compañía Tencent ya anunció que usará una especie de vigilante nocturno para evitar mediante identificación facial que los niños rompan las reglas. El sector de los videojuegos en China está integrado por unos 665 millones de jugadores – por lejos el primer mercado mundial – y genera unos 32.000 millones de dólares anualmente.
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